Hoy voy a confesar que de mayor me hubiese gustado ser como Mira Nedyalkova. Cuando encontré su web, , experimenté una serie de sentimientos encontrados, por una parte conmoción ante la intensidad y belleza de las imágenes que acaparaban toda mi atención, por otro lado una envidia sana encubierta por una gran admiración. Y es que entre mis aficiones, hubo un tiempo en que una de mis favoritas era la fotografía, pero ante la falta de medios y modelos, me fotografiaba a mí misma y luego, dado que nunca me ha gustado ser protagonista de nada, retocaba las fotos hasta convertirlas en una especie de pinturas digitales con base fotográfica en las que mi rostro apenas si podía intuirse.

Pues bien, en cierta medida esto es lo que hace Mira. La fotografía para ella es una vía de escape, es su manera de expresarse y la mayoría de sus fotos son autorretratos en los que la postproducción tiene un peso muy relevante.

Hemos charlado con ella y nos ha contado algunas cosas muy interesantes:

Me llamo Mira Nedyalkova. Soy de Bulgaria, nací y vivo en Sofía. es un nombre que nació a raiz de un proyecto fotográfico que hice con otra persona entre el 2007 y el 2010. El proyecto se llamaba “Mirabilia Images”. En realidad fue ese el momento en que realmente empecé a dedicarme a la fotografía y, de alguna manera, quería mantener una parte de ese período también en mi futuro.

No me dedico profesionalmente a la fotografía, es más, ni siquiera diría que soy una fotógrafa porque lo que hago es una mezcla entre fotografía y pintura, incluso me atrevería a decir que un poco más pintura. Para mí la fotografía es pasión, algo que me da serenidad y mucha satisfacción. A través de lo que hago, hablo de mí y de mi mundo, el mundo en el que siento la vida y a través del cual quiero transmitir emociones. No estoy segura de estar preparada para transformar esta pasión en trabajo, no sería lo mismo, debería satisfacer una serie de compromisos y eso creo que no me gustaría.

En mis fotos hablo de mi mundo, de mi alma, de mi corazón. Soy toda yo, son mis placeres, mi felicidad, mis miedos, mi dolor, mi amor… Nuestra vida se compone de todas estas cosas y yo intento unirlas todas en mis fotografías porque creo que los sentimientos son muy valiosos y son los que nos hacen avanzar. El dolor es lo que más me intriga, creo que es el sentimiento más profundo y puede albergar todos los otros sentimientos y emociones. Creo que el dolor es nuestro salvador porque nos hace apreciar la vida, el placer, el amor…

Para terminar nos confiesa que adora el trabajo de fotógrafos como Paolo Roversi, Jan Saudek, Ferdinando Scianna, Francesca Woodman, Sally Mann, Amber Ortolano y Laura Makabresku, entre muchos otros.

Espero que os guste y os llegue a emocionar tanto como a mí. Esas atmósferas tenebrosas, los cuerpos medio sumergidos en agua, las poses compungidas, derrotadas, etc. crean un ambiente oprimente y descorazonador que me toca muy profundamente. Si queréis ver su obra completa, podéis visitar su .