¿Quién dijo que el dolor no es bello? ¿Quién puso nombre, talla o color a la belleza? Con frecuencia nos quedamos en el exterior cuando miramos, pero la vida es más sencilla y más profunda; el reflejo del alma de los ojos del que mira es capaz de convertir algo terrible en hermoso.
Eso es lo que nos inspira el conmovedor trabajo de , que retrató día a día a su mujer Jennifer, quien libró su batalla contra un cancer de mama metastásico entre 2010 y 2012. El resultado se ha convertido en un y en un canto a la vida y al amor: “”.
Las imágenes son de una belleza trágica y llena de amor que nos ha dejado boquiabiertos. La composición, la crudeza de contrastes en el tratamiento de la imagen; y, sobre todo, la dulzura de la mirada del fotógrafo y valentía del rostro del Jenn nos hablan de esperanza, de vida aunque sea dura y de amor auténtico, sincero y puro.
Jennifer falleció un 22 de diciembre de 2012 y Merendino se dedicó a este proyecto como terapia para superar su pérdida. Así, ha construido una obra que paradójicamente no va sobre la muerte, ni sobre la enfermedad, sino sobre el amor y la vida. También, sobre las batallas que no elegimos, pero nos toca librar, y sobre el modo en que las vivimos y las afrontamos.
Esos últimos años, Jeniffer no perdió el sentido del humor, ni del amor, ni las ganas de luchar. Juntos construyeron una historia magnífica, un testimonio sobre la forma en la que afrontar la vida que nos queda, cuando el resto de nuestra vida la viviremos en compañía del cáncer.
Pocos meses antes de su fallecimiento (en agosto de 2012) Merendino publicó en una serie de fotografías sobre la reacción de la gente ante los paseos diarios que Jenn realizaba por prescripción médica.
Para cerrar este post os dejamos dos frases extraídas de la web . En la primera que Merino habla sobre las imágenes:
”Las fotos son el reflejo de los desafíos a los que enfrentarnos, de las dificultades, el miedo, la tristeza. De la soledad que tan vivimos y se plasmaba en la cara de Jennifer durante la batalla contra la enfermedad. Lo más importante de todo, es que estas imágenes demuestran nuestro amor. No nos definen, pero estos somos nosotros.”
Y en la segunda, sobre el motivo que le ha llevado a publicarlas:
”El cáncer está a la orden del día, espero que las imágenes ayuden a que la próxima vez que a un paciente de cáncer le preguntan qué tal lo lleva, la respuesta muestre más conocimiento, empatía, comprensión y una preocupación sincera y de corazón”
Gracias a por darnos a conocer el proyecto.
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