es un veterano diseñador gráfico valenciano especializado en construir, crear y diferenciar el principal activo de una empresa, producto o servicio: su marca. Con su simpatía y extroversión habituales nos ha concedido esta entrevista para que le conozcamos un poco mejor.
¿Cómo llega un artista visual como tú, al diseño gráfico?
Mi afición por el dibujo la recuerdo desde siempre. En mi adolescencia, mi padre me regaló una máquina de escribir Olivetti y un manual ¡pensaba que aprendería a usarla y así encontraría un trabajo para toda la vida! Después de estar curioseando en el manual descubrí en la última página, un ejercicio donde formaban dibujos con la repetición de una letra, por ejemplo un caballo con la sucesión se muchas A, para mi fue un gran descubrimiento y sin ser consciente de ello, mi primer trabajo con tipografía como elemento gráfico.
Nunca aprendí a escribir a máquina correctamente y, después de aquello, mi padre olvido que trabajara para un banco y se resignó a que me matriculara en la Escuela de Artes y Oficios, donde en aquel tiempo, se daba una formación muy cercana a las bellas artes. El tercer año opte sin dudarlo por la especialidad de diseño gráfico y hasta hoy.
¿Cuáles son tus referentes?
Con el tiempo he aprendido a admirar a los clásicos del mundo del arte de la fotografía y del diseño, intentando aprender de ellos, sin perder de vista algunos de los grandes todavía en activo, podría citar a muchos por ejemplos. Fotógrafos como , , o Artistas como , l, o .
En cuanto a diseñadores, desde que en mi infancia me quede fascinado por las cerillas de fósforos del Pirineo realizadas por , he admirado el trabajo en España de para Camper, todos los diseños de y desde luego los clásicos como , o por qué no en diseño industrial el increible trabajo de para Braum 1960, con sus maravillosas sillas o con el primer i-Mac en color y trasparente o el primer i-pod que revoluciono el mundo de la informativa y la música.
Me dejo muchos, uno tiene los ojos muy abiertos y nunca deja de aprender.
En tu opinión ¿Qué relación tienen con el arte (si es que la tienen) la fotografía y el diseño publicitarios?
Todo buen diseñador gráfico con el tiempo es en potencia un artista plástico, las coincidencias son muchas, el dominio de color, composición, concepto, forma, mensaje, etc.
La diferencia más importante es que el artista trabaja con libertad para el desarrollo de su propia obra y el diseñador gráfico persigue junto con su cliente un objetivo comercial, algo que nos obliga a ser extremadamente versátiles y a huir constantemente de la repetición.
Lo mismo en la fotografía, la historia esta llena de grandes ejemplos de piezas creadas con fines publicitarios, que con el tiempo se convierten en obras de arte, como los carteles de las Vanguardias Rusas o las Fotografías de Cartier Bresson.
¿Cómo definirías tu estilo?
Procuro no tener estilo y trabajar de forma diferente cada proyecto, pero supongo que tengo una forma de trabajar por la que se me reconoce, al menos eso me dicen. Desde luego, doy una gran importancia a la fotografía, utilizo con frecuencia blanco la verdad… en fin, pero la verdad es que no sé si muy bien.
Háblanos de aquellos trabajos de los que estás más orgulloso.
De los más recientes, me gusta especialmente el trabajo que realizamos para el de renovación de imagen que ha buscado mejorar de una forma radical la imagen global de una empresa, es algo en lo que poco a poco nos hemos especializado con el tiempo, lo hicimos con cambiando su posicionamiento y toda su imagen.
El difícil encargo de realizar la marca de la , a la que pertenezco desde sus inicios.
Un cartel realizado con chocolate, para la promoción de pedacitos de naranja cubiertos de chocolate, aunque tengo un especial cariño al trabajo más recientemente para la misma empresa
Un calendario sobre toda su gama de frutos secos, donde aunando la excelente fotografia de y una tipografía gestual realizada con mi hija , conseguimos un resultado muy fresco y sencillo, que comunica lo natural de sus productos.
Por último quiero resaltar, lo que una revista vino a llamar proyecto Moleskinez que no es más que la suma de Martínez y las famosas libretas de la marca Moleskine.
Lo que empezó como una idea, transferir las fotografías de cada uno de mis viajes a las libretas, me obligó a investigar todas las posibilidades de los disolventes y su reacción con el papel, sumando a ello otras técnicas tradicionales. Consiguiendo así unir fotografía, diseño, tipografía, dibujo o sea todas mis manías en una.
Al ver mi trabajo me invitaron a preparar una exposición en la Escuela Superior de Diseño de mi colección de libretas. Poco después a consecuencia de las constantes preguntas sobre la técnica que había desarrollado, decidimos montar el verano pasado varios talleres en el estudio, que repetiremos nuevamente a partir del mes de Junio y a los que estáis invitados.
¿Qué opinas de los premios que has recibido?
Nunca me han preocupado los premios, me basta el reconocimiento que me ha supuesto que mi trabajo haya sido seleccionado en museos o publicaciones especializadas o que me llamaran para dar clase en algún master de diseño, el mundo de la enseñanza que me parece muy gratifícante.
El mejor premio es la confianza absoluta por parte del cliente, único medio para conseguir realizar un buen proyecto. Algo que no es tan fácil como en principio parece.
¿Cuáles son tus principales fuentes de inspiración?
El trabajo del diseñador es una continua lucha contra la fealdad y la defensa de la belleza, yo tengo mi propio nombre para definirlo, le llamo Electricidad Estética, cuando la fealdad llega a límites insoportables, por ejemplo esos puestos de venta a la puerta de los campos de futbol, donde se acumulan unos objetos, banderines, gorros y objetos enorme mal gusto, también me puede pasar delante de un mal cartel o de un restaurante ferozmente decorado. Estoy incomodo y prefiero marcharme.
No confundir con los lugares viejos o abandonados que suelen tener una gran belleza plástica.
Mis fuentes de inspiración son variadas. Cualquier cosa puede inspirarme… desde una película, la vista a un museo o un viaje a un lugar desconocido, todo lo que represente algo nuevo, estimulante y bello.
Vivimos un momento de explosión de la creatividad y el diseño, donde se mezclan muchos estilos y donde las redes nos permiten ver al instante lo que está pasando y la posibilidad de compartirlo y difundirlo con cualquier otro profesional del mundo, o nos dan esa oportunidad así como infinidad de blogs que nos cuentan lo mejor de lo que está pasando, esto es algo que ha sido muy importante en esta dificil profesión.
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