Como en una película china antigua, las delicadas imágenes de Tomoyuki Shinohara recrean la inconsistencia de los recuerdos y los recubre de una suave luz. Con frecuencia, Shinohara utiliza en su trabajo una cámara Rolleiflex SL66 TTL, un clásico que Rollei comercializa desde 1966.
Con esta pieza de museo, el fotógrafo japonés es capaz de llenar su trabajo de imágenes limpias, de una sencillez poderosa y una luminosidad que las hace cautivadoras.
Las fotografías de Tomoyuki parecen contar historias de recuerdos sin deseo que confunden, se vuelven perezosos y escapan de la voluntad. La soledad flota y crea a su alrededor una atmósfera apacible en la que cualquier llama se apaga lentamente. La serenidad todo lo llena.
Todas las imágenes © Tomoyuki Shinohara. Fuente: