Las inquietantes esculturas del holandés Eric Van Straaden están realizadas con una técnica llamada Additive Manufacturing. Sin entrar en detalles técnicos, es una forma de dar vida a capas de un material similar al yeso con una impresora 3D. Una técnica compleja con la que consigue crear personajes surrealistas en un mundo plagado de iconografía kitsch, pop, inocencia y rebeldía.
Eric nos cuenta qué representan sus figuras y en qué se inspira para crear una obra tan criticada como amada.
No estoy interesado en la figura masculina como tal, creo que las características propias de la personalidad masculina ya han traído un montón de tristeza al mundo. Pero como soy un hombre, también estoy predestinado a tener una forma más bien narcisista y quizás infantil de ver la vida.
Para mí, la atención a las niñas en el umbral de la edad adulta refleja tanto mi propia obsesión como la de la civilización occidental contemporánea con los jóvenes (con la juventud como un estado congelado). Si me preguntas ¿qué significa este enfoque para el desarrollo de la feminidad de las adolescentes?, la psicóloga y antropóloga Mary Pipher lo describe dolorosamente bien en su libro, Reviving Ophelia: Saving the Selves of Adolescent Girls.
Mediante el uso de diferentes accesorios, animales y elementos del paisaje, trato de transformar a las Ofelias en Némesis -en el sentido de la diosa griega Némesis, el espíritu de la venganza divina contra los que sucumben a la arrogancia: arrogancia ante los dioses.
En un análisis más profundo tendría que reconocer que las chicas son visualizaciones de mis propios sentimientos, fantasías y pensamientos. Tal vez se parecen a alguien que conocí y los diferentes retratos dicen algo acerca de lo que pienso de mí mismo en lo que respecta a la mujer o a las mujeres en general. Anhelos, miedos, pérdida. Aunque las figuras tienen un aspecto dulce, a veces son para mí demonios que trato de sacar de mi mente. Al mismo tiempo, me preocupo por ellos y siempre trato de hacerlos independientes de mí mismo, y para darles su propia “voz” e individualidad.
El artista, nos cuenta cómo surgió el encuentro con la innovadora técnica que utiliza.
Hace unos cuatro años, estaba tratando de hacer una serie comercial de “BJD” -unas Joint Doll Ball, muy populares entre los coleccionistas de Japón- con un prototipo en cera y lanzando una serie en resina. Debido a una combinación de formación insuficiente, pereza y perfeccionismo, esto se estaba convirtiendo en un calvario y en ese momento mi pareja en el amor y el trabajo, Jennifer Hoes, recibió una invitación para participar en un taller del Instituto de Tecnología de TNO en Eindhoven. Sugirió que podría participar también y tratar de hacer la muñeca en Rapid Prototyping.
Al cabo de unos tres meses tuve la oportunidad de hacer un prototipo para imprimir y trabajar -luego hice otros cuatro- y todos ellos se presentaron en la Semana del Diseño Holandés en 2009 – en el canal de Youtube puedes ver ejemplos.
Descubrí que el comercio no era para mí, pero tenía la idea de que la técnica tal vez era la respuesta a los problemas que tenía trabajando con la mano en la visualización de mis ambiciones artísticas. Después de algunos experimentos en materiales monocromáticos , descubrí con ayuda de i.materialise la manera de imprimir directamente en color.
También le preguntamos por el tipo de trabajos que realiza y por el proceso creativo.
Trabajo principalmente como artista y mis esculturas se venden través de galerías de arte. A veces hago cosas en 3D para mi chica, que es diseñadora; en otras ocasiones reproduzco modelos de otros diseñadores en 3D para imprimir y también realizo encargos de coleccionistas de arte que quieren algo especial.
La mayoría de las veces no estoy muy seguro de por qué las diferentes partes de la composición funcionan juntas. Cuando trabajo, trato de no pensar mucho acerca de lo que estoy haciendo -si lo hago, no resulta bien-. La mente sólo tiene que fluir, la explicación se hace después.
Por ejemplo, utilizo un montón de animales, además de las chicas para mis obras. Tal vez los animales proporcionan una manera de relacionar a la chica con algo así como las fuerzas de la naturaleza o, al menos, con algo animal. Ellos transforman o realzan, la aparente inocencia o vulnerabilidad de las niñas; al mismo tiempo, ellas se ven movidas -forzadas- a realizar algún tipo de acción, a veces dulce, a veces agresiva. Algunos dirían que los animales representan el propio artista, que a veces es sólo un espectador y otras, un actor que está guiando -o sometido- a la acción.
Creo que mi talento principal radica en convertir en bellas, simples cosas de ordenador. Uso un montón de plantillas -por ejemplo, una gran parte de mi colección de zapatos viene de la base de datos de Google SketchUp– pero deberías ver lo feas que son las piezas con las que comienzo.
Aunque técnicamente hablando la impresión 3D, especialmente en multicolor, es un gran reto, creo que todo el mundo podría hacerlo. El mayor reto en este momento es que la mayoría de modelos 3D y el software de modelado 3D no es realmente compatible con la impresión en 3D y que el artista tiene que pensar en diferentes maneras de alcanzar un objeto imprimible a partir de los modelos iniciales.
Aunque mis gustos están un poco pasados de moda soy un hijo de mi tiempo, por lo que me inspiro en digamos la cultura pop en general, y creo que en la cultura juvenil actual de Japón. La de los EE.UU. a partir de los años setenta y Europa a partir de los años 80/90 proporcionan las imágenes más poderosas.
No hace falta decir que ‘Lolita’, concebida por primera vez por Vladimir Nabokov, es una figura icónica importante en mi trabajo.
Técnicamente me siento inspirado por la “lucha” por lograr un resultado “perfecto” con medios limitados. A pesar de que trabajar en el mundo digital parece proporcionar medios ilimitados, la impresión 3D en este nivel es un gran desafío técnico y me gusta pensar en ‘soluciones’ sin llegar a ser demasiado complejo mentalmente y más mediante la combinación de herramientas fáciles de usar de diferentes tipos de software. Siento todo el proceso más como un viaje artístico que técnico.
Artísticamente, me siento inspirado principalmente por las representaciones de la forma humana, y especialmente las mujeres, sin mucha “distorsión” o “distracción” en la técnica. Por lo tanto, mis gustos son un poco “pasados de moda” o tal vez incluso kitsch. No me gusta el expresionismo o el trabajo abstracto o conceptual.
Como escultores me gustan mucho Bernini y Furienmeister -una especie de Bernini, pero en pequeñas tallas de marfil- . El artista más importante para mi propio desarrollo ha sido Hans Bellmer, un fabricante de muñecas y pintor del movimiento surrealista. Me gusta estar inscrito en y por el paisaje, y esto sucede en los retratos más potentes. Yo considero que mis obras son más retratos que esculturas .
El arte que funciona para mí es siempre de varias capas. Me gusta cuando a primera vista parece ser sólo una -en su mayoría hermosa- “verdad”, pero cuando se mira con más profundidad hay algo más en juego al mismo tiempo. Cuanto mayor es la obra de arte, más grande es la diferencia entre la verdad y la realidad del conjunto.
Imágenes (c) cedidas amablemente por el autor para ilustrar esta entrevista.