Entre el collage y la deconstrucción fotográfica, la obra de  oxigena la fotografía publicitaria. En lo profesional las cosas le marchan genial a este joven malagueño: campañas para marcas como Dolce & Gabbana, Izzue, Pepe Jeans o Mango jalean su trabajo más comercial. Su trabajo más personal, acaba de exhibirse en la exposición “Personal Branding”, en Málaga.

Artillo utiliza la descomposición en fragmentos de imágenes de estudio, caras y cuerpos perfectos. Aunque se trata de un trabajo creativo con una clara “misión comercial”, la riqueza en matices, materiales y perspectiva de sus imágenes aporta personalidad a su trabajo.

Aún salpicadas de esa melancolía displicente tan abundante en moda – que, personalmente me resulta cansina – el acicalado a golpe de pincel y recortables con que Artillo enriquece las imágenes durante la post producción consigue que el trabajo de este fotógrafo sea agüita fresca para el género publicitario.

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