Cuando me encuentro delante de una obra de arte cuya ejecución técnica es impecable, al margen de que pueda sentir más o menos afinidad o predisposición por el estilo del artista o la temática que trata, el sentimiento de admiración suele ser ineludible. Si además la obra es una pintura, o ilustración, y la técnica acuarela, ese sentimiento se multiplica por un factor indeterminado, porque se trata de una de mis técnicas preferidas y porque sé lo complicado que es controlarla con destreza.
El ilustrador ruso Dima Rebus es uno de esos ilustradores virtuosos de la acuarela que con solo 27 años se ha hecho un nombre entre los más celebrados y solicitados ilustradores de nuestros días. En la actualidad trabaja en una amplia gama de proyectos que van desde su obra personal a ilustraciones para revistas y otras publicaciones.
Sus ilustraciones son a menudo oscuras e inquietantes, con personajes siniestros o perturbados que surgen misteriosamente de atmósferas extrañas desafiando al espectador.
Todas las imágenes © Dima Rebus | |