Pues sí, has leído bien, es conocido por sus pinturas en las que siempre aparece un aventurero astronauta perdido en una época que no le corresponde, en medio de paisajes poco familiares para él, llenos de iconos de la cultura pop, logotipos de empresas y referencias a la ciencia ficción.
Scott, estudió arte en la Universidad de Dartmouth, Nuevo Hampshire (USA). Después de pasar un tiempo en el extranjero, regresó a Estados Unidos donde, en el año 2001, comenzó a pintar astronautas y, en ciertas ocasiones, dinosaurios. Desde entonces ha expuesto su trabajo en Los Angeles, Nueva York, San Francisco, Miami y Boston, entre muchas otras ciudades.